¿Por qué mi competencia aparece antes que yo en las búsquedas de Google si yo he escrito la noticia antes que el resto? ¿Por qué si ofrezco contenido original y de calidad no aparezco en las primeras posiciones? Estas preguntas recurrentes suelen venirnos a la mente cuando trabajamos en un medio digital.
La respuesta es simple: tu artículo y en general toda tu web puede no estar mimando al gigante Google y este, ni corto ni perezoso, te está penalizando arrastrándote al olvido en las últimas posiciones.
Existen dos tipos de penalizaciones. Las directas, que dentro de lo malo son las mejores porque es Google quien te avisa de tu error y te da un plazo para subsanarlo, y las automáticas, de las que no eres avisado y que sólo descubrirás cuando ya seas poco visible para tu audiencia.
¿Qué podemos hacer para evitar una penalización automática?
Aunque bien es sabido que Google no da a conocer sus algoritmos a la hora de rastrear las webs, sí se conocen algunos de los aspectos por los que sus robots relegan tu web a la invisibilidad.
Como verás, en la mayoría de ocasiones, se trata de diseñar y planificar tu página y escribir tus artículos pensando más en la audiencia que en ti como empresa.
Estos son los 8 errores más frecuentes que pueden favorecer la penalización en Google. Errores a los que, por supuesto, vamos a dar solución.
1.- Contenido duplicado
Como ya dijimos en un post anterior sobre el contenido duplicado es imprescindible que todos los artículos que aparezcan en tu medio de comunicación digital sean originales, de lo contrario, Google podría detectar el plagio –ya sea de textos propios o externos- y penalizarte.
2.- Velocidad de carga
Que tu página web tarde mucho en cargarse para poder ser leída al completo es causa directa de penalización no sólo de los usuarios que, aburridos, se marchan a otros medios para informarse, sino también de los motores de búsqueda de Google.
Mejorar la experiencia del usuario es uno de los ítems que valora y desde luego una carga lenta no es la mejor experiencia. Para lograr una mayor eficiencia en la carga optimiza siempre las imágenes y los vídeos. No dejes que se publiquen fotos o vídeos que ‘pesen’ demasiado.
3.- Enlaces, vídeos e imágenes rotas
Siguiendo con la línea anterior de aportar una buena experiencia al usuario, no hay nada peor que un internauta espere encontrarse con una información valiosa o un vídeo concreto y que lo único que obtenga es una página o vídeo no encontrado. Esto puede producirse porque la URL de los mismos haya cambiado en su origen pero no en la noticia en concreto.
No dejes que una imagen, un vídeo o un enlace roto te castiguen por los motores de búsqueda. Elimínalos en cuanto los detectes y sustitúyelos por enlaces que sí redirijan a una página concreta o se muestre la foto o el vídeo que anuncias.
4.- Abuso de palabras clave
Todo redactor tiende a poner muchas palabras clave en su pieza porque considera que de esta forma será más fácil para los motores de búsqueda detectar su información. ¡Error! Google penaliza un artículo que cuente con una gran cantidad de palabras clave que, además, no sean exclusivas del tema en cuestión.
Intenta que tus palabras clave centren la temática del artículo y siempre se encuentren en tu texto. Con dos o tres palabras clave es suficiente y nunca pongas más de siete.
5.- Compra e intercambio de enlaces
Muchas veces por querer ser más listos que Google acabamos perdiendo. Es lo que ocurre cuando una empresa compra o intercambia enlaces para conseguir un mejor posicionamiento.
Esto es, si tu web es enlazada muchas veces por otras webs Google lo identifica como positivo puesto que parece que la información que tú ofreces es referenciada y apreciada por otros dominios.
Pero cuando compras enlaces y las webs que te enlazan no tienen nada que ver con tu contenido entonces Google sospecha, entiende que no ha sido un acto espontáneo y te penaliza.
6.- Publicidad intrusiva
La publicidad molesta que no deja una lectura tranquila de un artículo o un visionado lineal de un vídeo también es causa de penalización.
Si tu medio digital cuenta con mucha publicidad que emerge de la nada mientras estás queriendo leer un artículo o visualizar un vídeo intenta rebajar su número puesto que este tipo de anuncios no son bien recibidos por la audiencia y por tanto, tampoco por Google.
7.- Metadescripciones vacías o duplicadas
Las metadescripciones de cada artículo son importantísimas para que los rastreadores de Google detecten con más rapidez de qué va tu información y puedan localizarla.
Que ese espacio dentro de tu gestor de contenidos quede vacío o esté duplicado en numerosas ocasiones complicará la tarea de los motores de búsqueda y estos perderán el interés por ti.
8.- Spam en los comentarios
Además, si cuentas con un medio digital, has de estar atento a los comentarios de los usuarios para que no se cuele un mensaje spam creado por un robot e interfiera en la libre charla entre usuarios. Elimínalos o Google eliminará tu web entre los primeros resultados.